Como cada 21 de junio me despierto con esa ilusión de cuando era pequeña, acordándome de la historia que me cuenta mi madre incansablemente, como si fuera la primera vez, siempre que llega mi cumpleaños, sobre el día de mi nacimiento…Y me emociono y lloro de felicidad. No tengo grandes ambiciones ni un planning de celebraciones para hoy, solo siento agradecimiento y serenidad en mi interior por todo lo que la vida me regala cada día, porque tengo salud para vivirlo y porque me siento afortunada, querida y acompañada por todas las personas que hay en mi vida, en especial por los que quiero y que aunque, en algunos casos, estén lejos siento cerquita, pero, sobre todo, siento en mi interior mucho agradecimiento por ver crecer a Álex y Emma con salud y alegría y por tener un compañero de vida a mi lado con el que comparto cada despertar.
¡Un abrazo muy muy fuerte, seguimos compartiendo junt@s! ¡Feliz Día de la Música!
Deja una respuesta